Capítulo 008. El juguete

ET_001-portada-webDurante mucho tiempo el animalito fue un juguete, era lógico, era algo muy esperado y novedoso por lo tanto había que «experimentar» que hacía o podía hacer.
En este capítulo he puesto muchas fotografías donde reflejan que al principio todo era juegos y adiestramientos, ¡tenemos un juguete!.
Dame la patita, trae la pelotita, etc, lo de la «patita» mi mujer lo intentó también algunos ratos pero más bien con poca fortuna, fue Diana la que realmente más tiempo le dedicó a ello, la patita nunca la dio siempre que se la pedías aunque a veces lo intentaba y poco a poco fuimos desistiendo pero creo que eso le sirvió como acción para recordarnos que quería compartir nuestra comida apoyando su pata en la rodilla o dándonos unos golpecitos con ella como «sin querer molestar» y es que ya lo dice el refrán «el que no llora no mama»                                           .perro-pasillo-cocina-web_DSC0171 pili web

diana-juguete-webLo diré mil veces en todo el libro pero es que era un animalito muy noble, cuando le decías «quédate ahí» (quizás por el tono) normalmente se quedaba parado, igual que una persona obediente, un ejemplo es la foto siguiente.                            .perro-pasillo-webperro-pasillo-balanza-webUna tarde Diana se entretuvo en ponerle calcetines, zapatillas y enseñarle a que le trajera la pelota.                                                  ,yuco-calcetines-webpasillo-pelota-web traerla no la traía pero salía corriendo a por ella por el pasillo patinando como los dibujos del «correcaminos y el coyote» agarrándose como podía al suelo, arañando el parquet con las uñas, luego en la frenada continuaba resbalando hasta que se paraba, era un espectáculo, nos partíamos de risa… daba igual lo que le tirases, desde una pelota a un perrito de peluche al que le tomó cariño porque a veces lo cogía con la boca y se lo llevaba a su cama, sobre todo a la hora de dormir.                                                      .cuna-001-webEn otra ocasión Diana se entretenía poniéndole unas gafas de sol para hacerle una foto, él se quedaba quieto pero antes de hacer la foto se daba con la pata y las gafas se caían, esta fue la instantánea de tanto insistir y ver que no podía conseguir la foto; lo que me he podido reír durante estos años al ver estos gestos, la ira de Diana y la cara de sorpresa de Yuco… ja, ja, ja…
PICT0013-gafas-webAlgunas veces también le hacíamos de rabiar en el momento que estábamos preparados para salir a pasear, él estaba ya dando vueltas por el pasillo porque sabía que la salida era inminente, yo con las llaves y las bolsas de la basura en la mano y con la chaqueta puesta pero alguien se encargaba de sujetarlo, en el momento de abrir la puerta de la calle y ver que no podía salir el perro se ponía histérico y comenzaba a chillar igual que si hubiera caído atrapado en un cepo, intentaba liberarse dando tirones y agarrándose como podía con las uñas en la alfombra pero no lo conseguía, en el momento de soltarlo salía como un misil, luego al doblar el pasillo resbalaba y tomaba la curva retorcido resbalando las patas traseras, nos partíamos de la risa a la vez que se escuchaba desde la cocina: ¡ya estáis jodiendo al perro! ¡desde luegoooo..! ¿queréis dejar al animalitooo? pero para esos entonces ya estábamos llegando a la puerta de la calle, él siempre el primero porque bajaba las escaleras «sin pisarlas» como si hubiera fuego en la casa, luego en la puerta me esperaba porque generalmente estaba cerrada pero cuando la encontraba abierta no pasaba de la acera y allí me esperaba para que le pusiera la correa, nunca, nunca salió corriendo calle arriba, es otro detalle que nunca olvidaré…

Otra manera que teníamos de jugar con él _especialmente yo_ era darle golpecitos en el hocico para cabrearle, al momento ya conocía mis intenciones y retraía los labios enseñándome los colmillos (para impresionar) a la vez que gruía débilmente, a veces conseguía atraparme la mano pero es increíble la habilidad que tienen para efectuar un cierre ultrarrápido de las mandíbulas y a la vez no apretar para no dañarte la mano… Fotografía de David en un momento que me pillaba… la dentadura en esas fechas era perfecta, completa, blanca y limpia.                                            .PICT0026-yuco-dientes
La imagen de la cabecera pertenece a esta serie que titulé ET, el perro extraterrestre. Quietito, paciente y obediente…. como un juguete.                                      .cuna-002-webET_001_8-rep-webNunca, repito:  n u n c a  se subió a un sofá, ni cuando era joven siquiera, así que si querías tenerlo a tu lado lo tenías que subir tu pero el animal sabía que ese no era «su sitio» y en cuanto tenía ocasión se bajaba que para eso no había que ayudarle incluso durante el año y medio que anduvo en tan mal estado de las patas traseras.            .DSC_6414-webDSC_6063-agustin-webOtras imágenes de sofá…                                         .panoramica-david-sofa-websofa-dientes-webAquí otra serie donde lo taparon con hierba recién cortada y quedó «camuflado» delante de ellos, ¡qué paciencia tenía el animal!..                       .yuco-hierba-webRevolcarse le encantaba, supongo que como a todos los de su especie… las orejas con pelo largo era un detalle muy característico en él.

yuco-david-webCualquier momento o lugar era bueno para hacerse una fotografía con él….             soniagustin-perro1-web sonia-perro1-sonia-web100_1092-webPICT0005-diana-pelota-webPICT0002-diana-yuco-webA lo largo de 11 años hay una barbaridad de fotografías y otros tantos detalles que contar pero no cabe todo en este artículo.
Según vas eligiendo las fotografías a veces te encuentras con lágrimas en los ojos y una amplia sonrisa en la cara, son las dos caras de esta moneda…

Gracias por llegar hasta aquí.  alcorlopantano.com