Nuevo seguidor de estrellas. V5

De nuevo vuelvo otra vez con el tema de los seguidores de estrellas caseros, este nuevo hace el número 5, es idéntico y a la vez diferente, es el resultado de lo aprendido de los modelos anteriores si bien tienen en común el seguir con la mayor precisión posible el movimiento de la tierra o de las estrellas, dependiendo de cómo se mire.

En este relato está la prueba sobre una sesión de timelapse a la Vía Láctea donde se puede ver el resultado en ESTE VÍDEO así que hablaré de cuestiones técnicas de fabricación, de cómo realizar las fotografías, de aciertos y errores que aunque parece que todo se conoce siempre hay “peros” o la maldita ley de Murphy que parece estar siempre omnipresente poniendo la zancadilla en cuanto bajas la guardia.

DISEÑO Y FABRICACIÓN DEL APARATO SEGUIDOR “¡No sé por qué te complicas la vida en fabricar este tipo de cacharros cuando a la venta hay cositas de poco más de 200 euros que son muy cucas y muy monas!” Esta frase me la podría decir cualquiera que no me conozca pero la respuesta es que TODAS las veces que hemos intentado hacer fotografías a las estrellas con ese tipo de aparato y con máquinas réflex de cierto peso y envergadura el resultado ha sido siempre el mismo: ¡no lo hemos conseguido! ¿por qué? Pues fácil, porque el fabricante del cacharrito asegura que puede mover dispositivos de 2kg de peso pero NO DICE que ese peso tiene que estar en el centro del eje y en cuanto que lo alejas no puede ni con un paquete de tabaco. Para resolverlo hay que andar montando pesas y equilibrando masas, o sea, un rollo.

Es ese casi el principal motivo por el que no tengo un aparato de esos en la mochila pero realmente el principal motivo es que me gusta experimentar y disfrutar de los resultados de mis diseños, y también por qué no “padecer cuando no cumplen con lo que se esperaba de ellos”.

En esta entrada está todo la información de los seguidores anteriores. http://alcorlopantano.com/2019/11/13/magnifico-seguidor-de-estrellas-casero/

De todo aquel batiburrillo de aparatos fabricados hasta la fecha saqué la conclusión de que el eje principal del seguidor debe ser robusto y preciso a más no poder, donde poder montar en él cámaras y equipos sin ningún tipo de miramiento de pesos o envergaduras. El siguiente paso hacia atrás es que en el eje debe haber montado un plato, disco o piñón de al menos 100mm de diámetro, eso garantizaría gran resistencia al peso que vendría del eje, en el supuesto de que la cámara trabajara en el peor de los casos, o sea, en movimiento vertical absoluto.

Lo ideal es que este plato de 100mm fuera atacado con un “tornillo sinfín”, esto garantizaría que el eje de salida nunca haría mover el resto de mecanismo que hay detrás de él, no es el caso de piñón contra piñón que siempre acaba cediendo como ya vimos en los seguidores anteriores.

Teniendo en cuenta estos DOS DETALLES muy importantes busqué por la web la manera de conseguirlos pero no encontré nada que se ajustara a medidas o pesos (quizás buscara poco o en lugares que no existían), el caso es que al no encontrar nada aparente por ahí busqué entre la caja de despiece de aparatos y encontré un juego de piñones de plástico de una impresora muy antigua; sus dientes tan finos me parecieron que merecían emplear un tiempo en probar hasta donde podían hacer un seguimiento a las estrellas incluso mejor que sus hermanos anteriores y así comencé a diseñar la versión V5.

La caja está compuesta por unos trozos de planchas de acero inox (que era lo que había más a mano y más aparente), un rodamiento con diámetro interior de 15mm me pareció más que suficiente para aguantar muchísimos kg en ese eje y en el extremo opuesto otro más pequeño porque no hay tanto trabajo en ese punto.

Para alojar los dos rodamientos ya me hubiera gustado tener una plancha de 1cm de espesor y con una fresadora haber hecho los orificios donde irían mentidos a presión los dos rodamientos pero de eso no hay por casa así que con unas tiras de metal hice la forma de los alojamientos y los soldé a las chapas… en plan herrero de pueblo.

El segundo eje pues… más o menos lo mismo, todo fabricado con bastante esmero y precisión y sobre todo robustez para quedar los dos ejes protegidos entre las dos chapas que formarían la caja principal.

Ahora faltaría el grupo tercero, una caja reductora que me regaló Josemi de esas que llevan los aparatos microondas, sería buena solución porque tiene una gran reducción, luego solo faltaría el grupo cuarto en el que va incluido el motor y la regulación de velocidad que como en veces anteriores un regulador de faros de automóvil bien manipulado haría un trabajo perfecto alimentado sobre 8 voltios; teniendo en cuenta que están diseñados para trabajar con 12 voltios los 8 V le aseguran una larga vida.

Y de esta manera sin entrar en demasiados detalles vio la luz el seguidor V5, no tiene una corona sinfín que sería ideal pero los dientes tan pequeños y su diámetro de 90 mm prometía, ahora solo faltaba probarlo. Quizás haga un vídeo en tiempo después con los detalles y resultado de esta versión de seguidor.

La primera prueba fue unos días anteriores al timelapse del vídeo relacionado con este post que he colgado en Youtube. Como siempre que pasa si necesitas estrellas hay nubes y viceversa por lo que a duras penas y durante dos horas puede comprobar su funcionamiento y acabar de ajustar la velocidad y en pocas palabras puedo decir que: “ha sido la versión que “a priori” mejor ha respondido de cuantas he fabricado”.

Ya he comentado cerca de mil veces (jajajajja) que hacer fotos a la Vía Láctea no es tan fácil como puede parecer. Si tomamos como ejemplo la fecha del mes de Mayo cuando la Vía comienza a ser visible sobre las 23:45 y lo hace de la mejor manera posible, o sea, muy paralela al plano de la tierra (no como en el mes de Septiembre que cuando aparece está ya vertical) y tenemos en cuenta que la luna no debe existir en el firmamento durante la sesión y que eso suele darse solo tres o cuatro días al mes en el mejor de los casos y si a eso le sumamos que esos tres o cuatro días caigan en fines de semana y ¡claro!, que en esos días no haya nubes ¡faltaría más! pues… parece que la cosa se complica un poco ¿no?

Bien, pues como este fin de semana coincidía todo menos eso de “las nubes” y con todas las ganas que tenía de disfrutar de la noche puse pies en la sierra de Guadalajara esperando que con un poquito de suerte a lo largo de la noche las nubes dejaran algún hueco y permitieran ver la Vía Láctea, aunque fuera un poquito, porque la técnica que iba a utilizar sería diferente, o sea, se mezclaría el resultado del funcionamiento de un nuevo seguidor y una nueva técnica.

LA NUEVA TÉCNICA DEL TIMELAPSE A LA VÍA LÁCTEA.

Esto de hacer fotos a la Vía Láctea cuando “se la está cogiendo uno con papel de fumar” tiene necesariamente que hacer números si quiere tener resultados un tanto dignos.

Fotografiar la Vía Láctea con cámaras fabricadas en el 2020 y con 5.000 euros de equipo, con cámaras de sensores de 45 mpix pues… no debe tener gran misterio pero tratar de hacer lo mismo con una Nikon D300 (2007) o una Canon 50D (2008) pues realmente y como decía antes «hay que cogérsela con papel de fumar”.

Claro está que hacerle un vídeo timelapse a la Vía no es lo mismo que hacerle unas fotos, pero tanto una cosa como la otra requiere de imágenes limpias, más incluso el vídeo que luego se traduce toda la pantalla en multitud de puntitos vibrando. A una fotografía de la Vía se le pueden apilar otras semejantes para disimular o reducir el ruido pero al vídeo ¿qué le hacemos? Pues aparte de emplear plugins para reducirlo (y con ello parte de las estrellas menos visibles serán borradas), por no decir de los colores que a duras penas puede mostrar la Vía Láctea, sobre todo si las condiciones en las que se tomaron las imágenes no fueron las más apropiadas como contaminación lumínica de la zona, calima en el ambiente, presencia de polvo del desierto en el cielo y algún que otro más etc etc.

La NUEVA TÉCNICA de la que hablaba es esta. Resulta que si tomamos una fotografía de 30 segundos a la Vía Láctea SIN SEGUIDOR las estrellas ya comienzan a verse como trazos, bueno, dependiendo de la focal utilizada se verán más o menos, con 24 mm serán mucho más visibles que con 12 mm, igual que el tamaño de las estrellas será el doble de grande a 24 que a 12mm.

Siguiendo con el mismo ejemplo de 30 segundos “sin seguidor” nos encontramos trabajando con un iso de 3600, prohibitivo pero no imposible para las cámaras Nikon D300 o Canon 50D, esto nos llevaría cuando andemos sentados en la banqueta delante de la pantalla a pegarnos de puñetazos con el ruido, por no decir el color que se pierde con la reducción del ruido.

LA CANTIDAD DE FOTOS TOMADAS. En una sesión vamos a llamarla “normal” de timelapse a la Vía Láctea en el mes de Mayo podríamos hacer fotos durante un máximo de 5 horas, desde las 00:00 hasta las 5:00 aprox. Esto con una exposición de 30 segundos nos daría un resultado de 600 fotografías; si hacemos un vídeo a 29,97 fps tendríamos una duración de vídeo de 20 segundos y en el supuesto que eligiésemos 25 fps saldría un vídeo de 24 segundos, eso sí, este último con un movimiento más brusco y menos suave de imágenes.

Ya sean 20 o 24 segundos de vídeo siempre se nos quedarán cortos a los que nos gusta ver este tipo de película pues no nos cansaríamos ni con cuatro veces más, sobre todo si las estrellas se ven ocultas de vez en cuando con el caminar de las nubes.

Al hablar de esa nueva técnica me refería a emplear en vez de 30 segundos 40 o 50, ¿por qué no? Sin seguidor eso se traduciría en unas estrellas que más que redondas serían trazos por lo que no creo que nos gustara demasiado, por otra parte al pasar tanto tiempo entre un disparo y otro las estrellas se desplazarían tanto que luego eso “no hay Dios que lo ate” porque lo que luego en el vídeo veríamos un parpadeo de estrellas en el firmamento similar a cuando una pelota se descuelga por unas escaleras, pin, pin, pin pin…

¿Cómo solucionar esto? ¡Pues con un seguidor! ¿Qué fácil no? Pues ¡NO!, Porque las estrellas con el seguidor saldrían perfectas pero ¿Qué le ocurriría al paisaje de una fotografía cuando la cámara se desplazara haciendo un barrido mientras tomase la fotografía siguiendo a la Vía durante 40 o 50 segundos? Pues claro está, que el paisaje saldría movido o borroso… entonces ¿qué solución hay? Pues solución perfecta yo no la veo. Cuando en un solo escenario hay dos tipos de condiciones, una que se mueve y otra que está quieta pues claro está que o te decides por A o por B o quizás por un promedio que es lo que _después de ver los resultados de esa noche_ es lo más acertado.

Esa noche de experimentos y poniendo a prueba el seguidor opté por priorizar el movimiento de las estrellas, claro está que el terreno está borroso pero como no hay demasiado detalle en primer plano y como el sujeto principal es el cielo puede ser una buena opción.

Volviendo al tema de las medidas voy a reflejar los inconvenientes de esta larga exposición de 40 o 50 segundos para poder trabajar con isos más bajos, del orden de 800 o incluso 640.

Basándonos en el mismo ejemplo de las 5 horas de captura de imágenes si hacemos una foto cada 45 segundos y le damos 5 segundos extra a la cámara para que guarde esa imagen ya son 50 segundos con lo que en 5 horas conseguiremos solamente 360 fotografías frente a las 600 de la vez anterior, eso en vídeo serían solamente 12 segundos a 29,97fps o 14,4 si es a 25fps y realmente 12 segundos de vídeo para toda una noche de fotografía creo que resulta un tanto escaso por lo que surge la duda ¿merece la pena? Pues para mi gusto y después de lo que he visto en las imágenes de esa noche ¡claro que merece la pena!

Hay otro detalle a tener en cuenta al hacer vídeo timelapse a la Vía Láctea con seguidor que es el ángulo de rotación del seguidor, me explico, si pretendemos hacer un seguimiento a una estrella en concreto hay que posicionar bien el seguidor para conseguir que esa estrella esté siempre en el mismo punto del encuadre pero hay que olvidarse de mostrar terreno porque el giro de la cámara no será horizontal con el suelo por lo que hará una gran parábola mostrando un plano inclinado hacia la izquierda al principio y el mismo hacia la derecha al final; solamente estando sobre las 12:00 de la noche y la cámara orientada exactamente hacia el Sur saldrá durante un tiempo un paisaje horizontal… creo que no compensa, este tipo de vídeos sería para mostrar un grupo de estrellas en particular mientras las nubes pasan por delante de ellas, (es un ejemplo).

La Canon consiguió hacer 305 fotos, comenzó a las 23:44 y acabó a las 4:50. La Nikon consiguió hacer 420 fotos desde las 00:05 hasta las 5:23, lástima de no haber estado 45 minutos más.

Y hasta aquí la técnica, ahora los CIERTOS y ERRORES de esa noche, suertes y contratiempos.

EL CLIMA. Después de llevar varios días “el hombre del tiempo” pronosticando que durante el fin de semana habría más claros que nubes, finalmente y teniendo en cuenta la ley de Murphy y como no podía ser de otra manera fue al revés, y así lo demuestra porque el lunes amaneció con un estupendo cielo azul a más no poder, más limpio que la “mismísima Patena”.

Durante el sábado día 15 de mayo por la mañana anduve ultimando detalles del seguidor y aparatos de iluminación para la noche pero no me decidía a salir porque a medida que pasaban las horas lejos de verse más cielo lo que se veían era más nubes. Finalmente salí.

Tenía varios lugares elegidos y finalmente fui a uno conocido, una de las minas de Hiendelaencina, fotogénicamente hablando no es que sea la leche pero tampoco conozco tanto como para poder elegir, pues no debe haber pueblos cercanos en la línea de la Vía Láctea, debe haber objetos cercanos para dar sensación de movimiento y poder iluminarlos débilmente durante toda la sesión etc etc.

El sol se puso entre nubes que no dejaron escaparse ni un solo rayo de luz, aproveché para hacer un timelapse de las nubes pasando sobre los restos de las construcciones, un vídeo que saldría ya cocinado directamente de la tarjeta de memoria, un vídeo sin fotos.

Aproveché para tomar un bocado mientras se acababa el vídeo y llegaba la noche porque “ya me conozco yo el percal, luego te lias con aparatos y ajustes y no te da tiempo ni a cenar” (como casi así pasó).

Hay que tener presente que hacer vídeo nocturno NO ES LO MISMO QUE HACER FOTOS, mientras que en una fotografía durante el tiempo de la captura se puede iluminar la escena o trozos de ella durante ese tiempo de la captura, en el vídeo esa iluminación debe de ser permanente y constante. Para ello ya voy provisto de material adecuado, lamparitas led de diferentes grados de color para dar un ambiente más frío o más cálido y a la vez se pueden regular la intensidad de la luz, odio ese tipo de fotografías nocturnas o _incluso algún vídeo también he visto_ donde han puesto un tremendo foco en el cerro para iluminar un castillo o unos árboles viejos y rotos… eso no me gusta, me parece demasiado artificial, por ello utilizo una iluminación semejante a la luna llena, incluso menos, de esta manera el ambiente parece que no estuviese iluminado artificialmente porque no se trata de verle las pestañas a una mosca que se encuentra volando, el vídeo o fotografía nocturna “aparte de serlo debe parecerlo”, este es mi pensamiento.

Mi idea era utilizar DOS seguidores, ya puestos a estar toda la noche en el campo ¡qué más da uno o dos! Uno de ellos sería el V3 en el que confía mucho y otro el “nuevo” por supuesto, tenía que probarlo, era ese uno de los motivos por los que me encontraba allí aunque no sé si calificarlo como motivo o como excusa.

Como dije antes el movimiento de las cámaras serían paralelos al suelo y a la velocidad de desplazamiento de la Vía Láctea ya que sabía perfectamente donde aparecería en el horizonte y a la hora que lo haría, las nubes no me permitirían verla pero eso no iba a cambiar nada, al día siguiente vería el resultado de las capturas en las cámaras.

OBJETIVOS, ISOS, TIEMPOS, DISPARADORES.

La Nikon D300 la dispararía uno de esos digitales de mano, curiosamente voy a decir y a modo de chascarrillo que solo tengo uno para TODAS las cámaras que manejo, eso sí, con adaptadores ¡claro está! Resultó que encargué uno para esta Nikon en el mes de diciembre, pues bien, en el mes de abril finalmente me devolvieron el dinero por no ser capaces de enviármelo por lo que tuve que fabricarlo artesanalmente y hasta la fecha no ha fallado..

A Esta Nikon D300 le monté el Tokina 11/16 f2.8, con una focal de 11, incluso a 11 mm todavía queremos sacar más trozo de Vía Láctea, jajajaja. A la Canon 50D de monté el Sigma 18/35 1.8 ART, está claro que llevaba ventaja sobre la otra, ésta trabajó a f18mm f1.8 con ISO 640 y la Nikon con f11 f2.8 a 1600. Ambos equipos montados en sendos trípodes muy cerca uno de otro, como es lógico focales diferentes dieron como resultado vídeos diferentes.

Ya con la noche bien entrada me llevó un buen rato el ajustar la iluminación, dependiendo de colocarla en uno o en otro lugar me producía un efecto u otro bien distinto, algunos zarzales producían sombras muy alargadas oscureciendo la escena, si la luz la ponía muy cerca de la cámara había gran diferencia de luz con respecto al fondo. Si la iluminación era cercana al suelo la hierba chirriaba de luz, finalmente puse un punto de luz en una pared y otro más cercano utilizando una ventana, sin entrar en muchos detalles diré que parte de las tiras led estaban ocultas con pequeñas piedras para que no produjeran una luz dura en la escena ni sombras escandalosas.

En el interior de “la casa” puse otro punto de luz, esta vez roja, utilicé el plástico de una vela consumida para que produjera luz roja sobre el arco de la puerta, dentro del casco metí una luz led, ni que decir tiene que de poco sirvió que sujetara con piedras todo el conjunto porque al día siguiente al ir a recogerla vi que el viento había volcado el envase de la vela con el led y su batería en su interior.

Ya con la iluminación de la escena acabada y después de varios disparos de prueba con los 40 segundos de duración (de otra manera era imposible saber como quedaría porque los led apenas ni mostraban sombra alguna cuando caminabas por la escena, daban una luz semejante a media luna) comencé a poner en marcha las cámaras.

ERRORES de esa noche. Con la Nikon D300 (que era el alma de la fiesta de esa noche) solo había hecho un timelapse el mes anterior, que por cierto solo fueron unos 200 disparos y de una manera casual porque la Vía Láctea esa noche parecía que no tenía ganas de aparecer causada por la canícula que había, en esas fechas la Vía aparece sobre a las 2:00 de la madrugada y yo a esas horas y sin perspectivas de verla me eché a dormir que por cierto, al día siguiente los charcos estaban con una buena capa de hielo.

En esa noche la batería le sobró para hacer el trabajo pues no quise martirizar la cámara y la configuré para solo 200 disparos, pero esta noche de la que hablamos en cuestión fue diferente pues no tuve en cuenta que la misma batería puede hacer 800 fotografías de día pero con largas exposiciones y con el frio de la noche no pasa de 200 por lo que MI PRIMER FALLO fue el confiar en que la batería duraría muchísimo más tiempo, cosa que no fue así ¡claro! “Lo peor que te puede pasar es creer a pie juntillas en algo de lo que luego compruebas que estabas equivocado”.

La Canon 50D tiene el MagicLantern instalado, por lo que no necesita disparador pero tiene en contra que consume más energía, algo que tampoco había tenido en cuenta por lo que voy a llamarlo ERROR DOS. La batería es buena y nueva pero a las dos de la madrugada dejó de trabajar.

OTRO ERROR de esa noche fue el no poner en foco preciso el Sigma ART de la Canon, muchos fotógrafos se guían de las marcas del foco y de la profundidad de campo, yo ya he comprobado y demostrado que eso NO SIRVE DE NADA cuando se trabaja con aberturas f1.8 o mayores, por lo que hay que hacer un ajuste fino de foco con el liveview, cosa que yo no hice porque la Canon 50D en ese modo se come las baterías que da gusto. En algún lugar de este blog tengo un gráfico de consumo de las cámaras donde se ve que en el momento de pulsar para medir la luz y enfocar consumen unos 200 mA pero la 50d en modo liveview consume más de 900, para hacerse una idea. De poco me sirvió porque luego se quedó sin batería, jajjaja.

Sobre las 23:45 ya tenía los dos equipos preparados, la idea era que comenzaran a las 00:00 así que aproveché ese rato en tomar alimentos mientras washeaba con una antigua paisana de Alcorlo transmitiéndole lo que estaba percibiendo, los grillos, ranas, el búho y algún corzo rompían el silencio de la noche, igual que en Alcorlo hace más de cuarenta años, veía sin ver a los chiquillos (ella y yo entre ellos) correteando ocultándose en lo oscuridad de la noche jugando al escondite…

La noche no podía estar mejor para estar en el campo, el viento a ras de suelo no se movía pero las nubes pasaban a toda pastilla, a lo lejos, en el pueblo, se escuchaba ladrar de vez en cuando al mismo perro, a esas horas había 12.5 grados, por lo demás el ambiente no podía ser mejor, bueno sí, lo ideal es que las nubes fueran más pequeñas y separadas y no un velo que apenas a esas horas dejaba ni ver casi estrellas en el encuadre de las cámaras no así en la parte Norte que otra vez aludiendo a la suerte y la ley de Murphy no podía ser de otra manera.

Entre bocados de atún, aceitunas, huevo duro y sorbos de vino mezclados con los washap, de repente escuché un “PLAST” y el motor del seguidor NUEVO dejó de escucharse. Mi primer pensamiento: “Pues claro, una electrónica barata made in china y sin probar su funcionamiento durante varias horas a tope ¿qué vas a esperar?” me acerqué a ver y es que el controlador electrónico del motor (aún en fase de pruebas) lo había sujetado al cuerpo del seguidor con una tira de esas de doble cara y por el peso se fue despegando hasta que acabó en la tierra arrastrando con él la batería, y gracias que en la caída el conector del motor se soltó. En un abrir y cerrar de ojos volví a conectarlo pero en el vídeo se ve un pequeño salto fruto de que falta una fotografía.

Ya terminando de cenar me di cuenta de que una cámara no disparaba y me sorprendió “¡vamos a ver qué ha pasado ahora!” pues nada majete, ¡que no hay pila! Jajajja. Pues ale, a ponerle otra batería y ahí el segundo “enganchón que lleva la primera parte del vídeo”. Estando con estas se me ocurrió echar un vistazo a la Canon 50D y me encontré que no estaba trabajando, la indicación de la batería estaba parpadeando pero llevaba un tiempo sin hacer fotos… creo que durante solo uno o dos minutos pero tiempo suficiente para generar otro tirón en el vídeo, tirón que corregí en parte a través de modificar y crear manualmente un par de imágenes. Esta vez la suerte jugó a mi favor, de no haber estado en ese momento allí es posible que faltarán más de veinte fotos y el vídeo hubiera pasado de apenar verse el fallo a verse como un vídeo al que le faltaba “un bocado”.

Ya con las dos baterías repuestas me despreocupé en parte de las cámaras si funcionaban o no, las nubes parecían cada vez más espesas, en parte tenía cierta confianza para dejarlas a ellas solitas sin atenciones y me puse a disfrutar del momento que para mí era tan importante por no decir mucho más que el conseguir unas fotos ya tan vistas de la Vía Láctea.

La noche no podía estar mejor, ya casi eran las 2:00 cuando me di una vuelta por los alrededores, en la zona Nordeste había un gran claro done se veían unas estrellas enormes. Me senté en una peña y disfruté largo rato del canto del búho y del ruiseñor en aquellas dehesas cercanas, en tiempos antiguos cultivadas, hoy ocupadas por los fresnos y robles, para ser una noche perfecta solo me faltaba tener el perro como compañía.La imagen tiene un atributo ALT vacío; su nombre de archivo es DSC_3437-ok-web-1024x680.jpg

La contaminación lumínica es impresionante, cuando no hay nubes no se aprecia tanto pero cuando las hay es preocupante, tanta luz desperdiciada hacia el cielo… ni tenía sueño ni ganas de irme a la cama, no quería desperdiciar aquel rato disfrutando de aquel ambiente que con tantas ganas había estado esperando varios días a pesar de que las nubes seguían intentando conseguir que no viera esa noche ni una estrella de la Vía Láctea pero se acercaba un claro en la dirección que venían, con suerte no estaría todo el pescado podrido… Foto con la misma configuración de disparo, hacia la ciudad y hacia el lado opuesto.

CONCLUSIONES: tanto las cámaras como el resto de dispositivos eléctricos o electrónicos deben de tener energía de sobra para toda la sesión incluso para el doble; curiosamente para las cámaras Canon ya tenía un mecanismo donde sin apagar se puede conectar nuevas baterías, no hablo de grips que eso al final se traduce en movimientos y vibraciones innecesarios.

Las tarjetas de memoria tienen que ir sobradas en espacio, para ello hay que borrar antes de comenzar todo lo que se pueda borrar. La Nikon tiene un problema y es que a veces al grabar la fotografía en la memoria no la guarda bien y se traduce en líneas y rayas, en esta sesión lo hizo en tres ocasiones, las mismas que he tenido que inventar esos fotogramas…

Este nuevo seguidor V5 respondió perfectamente, por poner un pero y por no haber realizado las suficientes pruebas la velocidad es prácticamente exacta como puede verse si se comparan las imágenes del principio con las del final de la sesión, con reajustar el voltaje del motor será suficiente, en el vídeo las estrellas permanecen en el mismo punto como si estuviesen impresas en el cristal del objetivo. Al día siguiente, cuando me desperté, sobre las 7:30 el sol ya llevaba un rato sobre el horizonte, una pena, me hubiera gustado verle aparecer, este aspecto mostraba la escena y el día.

Por todo lo demás muy contento con la experiencia, la reflejo aquí porque _entre otras cosas_ no quisiera olvidarla.

 

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